El teléfono móvil/teléfono inteligente ahora es parte de nuestra vida y casi siempre está con nosotros. Pero en algunos casos, utilizar este tipo de dispositivos puede poner en riesgo nuestra propia seguridad. Descubra por qué es mejor deshacerse de su teléfono detrás del volante de una vez por todas.
Teléfono móvil mientras se conduce: la multa puede ir de 250 a 1.250 euros
De acuerdo a Administración Nacional de Seguridad Vial (ANSR), el uso del teléfono móvil durante la conducción provoca un aumento del tiempo de reacción ante situaciones imprevistas más que el efecto de una tasa de alcohol en sangre de 0,8 g/L. Además de poner en riesgo tu vida y la de los demás, manejar mientras usas tu celular tiene consecuencias legales. Las multas pueden oscilar entre 250€ y 1.250€, con prohibiciones de conducir de 1 a 12 meses y descontando 3 puntos del permiso de conducir.
El uso de este dispositivo mientras se conduce aumenta cuatro veces la probabilidad de un accidente, lo que perjudica la reacción del conductor. A una velocidad de 50 km/h, mirar el teléfono durante 3 segundos es lo mismo que recorrer una distancia de 42 metros con los ojos vendados, lo que equivale a una cola de 10 coches.
Las multas de tráfico en 2022 aumentaron un 4% hasta los 1,1 millones. Las multas por exceso de velocidad y alcohol fueron las que más aumentaron.